- Anabel Cervantes Alva
Poema Tequilero
Actualizado: feb 8

Tomada de: Amura Yachts & Lifestyle
Elixir embriagador
por tu mágica esencia,
aunque inerte cautivador,
transmutador de conciencias.
Herencia prehispánica
regalo de Dioses,
hibernas por años
en espinosos corazones.
Conocida bebida eres,
por el calor de tu cuerpo
para olvidar te buscamos
y en el beber nos perdemos.
Descubres de nuestras bocas
la mejor de las sonrisas,
y en el ir y venir de copas
al parecer nos dominas.
En tu sabor reposado,
las manecillas navegan
sobre tus aguas morando
en el barril de madera.
Te vuelves rico y maduro
con el transcurrir del tiempo,
entre más tiempo más puro
y entre más puro más quiero.
Brindas azulada calma
a mis tristes noches bohemias
remanso rocío del alma
anestesiando vas mis penas.
Anestesia peligrosa,
para el arriesgado forastero
que sin parar se desboca
en tu manantial austero.
Por el efecto sentir
de pagar olvida la renta;
por beberte comete errores
y al tomar pierde la cuenta.
Pierde del banco su crédito
y del amor los imanes
más con tu efecto termina
encontrando otros afanes.
Ay tequila no te acabes
reposar ya no te dejo,
que por ti perdí la calma
y mis bienes por...
(Es broma!,,)
Me despido por precaución
pues me punzan los sesos
hasta aquí llegó el poema
mi tequila y los excesos.
Aunque el tequila por su efecto
no es ni bueno ni malo,
el beber es un defecto
cuando te pasas de tragos.